S.S. Benedicto XVI

«Sean como los hombres que esperan el regreso de su señor» (Lc 12,36)

Hoy, el llamamiento a la vigilancia aparece con una urgencia muy inmediata. Había sido ya un tema central en el anuncio en Jerusalén, pero apunta anticipadamente a la historia futura del cristianismo. La somnolencia de los discípulos sigue siendo a lo largo de los siglos una ocasión favorable para el poder del mal.

Esta somnolencia es un embotamiento del alma, que no se deja inquietar por toda la injusticia y el sufrimiento que devastan la tierra. Es una insensibilidad que prefiere ignorar todo eso; se tranquiliza pensando que, en el fondo, no es tan grave, y así puede permanecer en la autocomplacencia de la propia existencia satisfecha. Pero esta falta de sensibilidad de las almas, tanto por lo que se refiere a la cercanía de Dios como al poder amenazador del mal, otorga un poder en el mundo al maligno.

Ante nuestros espíritus adormecidos, Tú, Señor dices de Ti mismo: «Me muero de tristeza». Yo te respondo: ¡Quiero velar contigo!

Joseph Ratzinger
Jesús de Nazaret

0 comments on “«Sean como los hombres que esperan el regreso de su señor» (Lc 12,36)

Deja un comentario

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s

%d bloggers like this: